De problemas y otras tonteras...

El problema básico reside en la forma concreta en que sos no-materia, colección de recuerdos por cobrar, un serial de sinapsis que no comprendo. Tenes esa calidad asquerosa de hacerme volver a los dieciséis y luego a los setenta; incorpórea como sos, te he sentido calarme hasta el hueso haciendo frito mis tuétanos, revolcarme en la cama ardoroso de ausencias y sobrecargado de falsas sensaciones. Ora tenes ese rostro de ojos lacios, ora esa boca que brilla como nocturna gota de lluvia sodomizada por la luz de una mañana de domingo de agosto.

El problema, no sos yo ni soy vos. No hacemos más que una suerte de limbo que lleno con estas palabras. No te siento llegar ni yo estoy por aparecer; canto de aurora sos, te oigo aún encerrado y recuerdo la muerte, salgo a tu encuentro y no te veo. ¡Ah! Maldecida sos por mis dedos, estrujados dedos por los dientes que ya no tengo. Apenas consumo la papilla salada de la derrota por llegar. No te encuentro bella, sos por hoy pedestre, tan pedestre y por tanto tan ajena como un buen salario.



[Volví a recopilar lo q voy apuntando desperdigadamente en el cuaderno que voy encontrando cuando tengo ganas de decir algo no necesariamente posteable, pero necesario. Este es el apunte número 10, y sigue siendo tan real como esa noche]

Comentarios

Jerry H. ha dicho que…
Tu primera y última frase (dentro de corchetes) lo dicen todo jefe. Un saludo.
Verónica ha dicho que…
Siempre es bueno leerte.

Entradas populares